sábado, 25 de abril de 2020

EL LADO B DE LA PANDEMIA

Se detuvo el reloj, la rutina y el día a día. Pero, ojalá hubiera sido sólo eso... se detuvo el TIEMPO y ahí perdimos todos, pero todos.
Se detuvo el turno al médico de la vecina con cáncer fulminante, se reprogramó el turno de la embarazada a punto de parir, cerró el laboratorio que diagnosticaba la enfermedad de mi amigo y sembró la incertidumbre, cerró el bar de la esquina que estaba por quebrar, se dejó a niños sin escuela, ESCUELA que era HOGAR para muchos, se canceló el viaje de tus sueños, se pospuso el plan de hacerte tu casa y cambiar el auto, se retrasó la cita con él o con ella.
Los domingos no hay mesas extensas, la embarazada está nerviosa, el que está en el final de su vida camina arriesgándolo todo, el enfermo ya dejó de pensar que se va a morir de la enfermedad que acarrea, el arriesgado sigue viviendo al máximo cada día, el qué se atreve a cruzar el límite lo hace todas las noches y los correctitos están haciendo la cuarentena.
Arrancaron los días fríos, la soledad de la serie de netflix, el pijama casi tatuado, la psicosis de querer lo que no se puede, las conexiones solo virtuales, el exceso de hábitos poco sanos, la necesidad del contacto piel a piel, la reflexión constante sobre todo lo que debo aprender interiormente en este tiempo, la nostalgia de extrañar, el álbum de fotos permanentemente al lado del mate como si viajar al pasado fuera la solución para alcanzar el futuro, la sensibilidad a flor de piel, el mensaje de texto a la persona equivocada, los encuentros secretos porque no hay pandemia que eviten las ganas, el te quiero cada vez más en tu boca porque estas cagado de miedo de no volver a verlo o verla, la lectura de ese libro que siempre pospusiste, el mate unipersonal, la confusión y la claridad de pensamientos, el vacío...
y lo ambiguo y más loco de todo es que el amanecer sigue siendo rojo, la luna brillante y las estrellas el mejor espectáculo del cielo.

MIEDO

¿ QUÉ ES?... podría citar a mil psicólogos, escritores, poetas, filósofos y psiquiatras. Pero a mi me gusta hacerlo bien personal. El miedo es el que muchas veces toma decisiones por vos o aún peor, es el que hace que no las tomes, es el que te detiene y te paraliza, es el que te condena a pensamientos oscuros y te encierra. Además es el responsable de que no saltes, no arriesgues, no apuestes... te asusta y Te deja detenido en el tiempo. Y te juro que el tiempo es lo único que no vas a recuperar aunque se te vayan esos miedos, les reces a tus santos, le pidas al universo o patalees como un niño.
Creo que el miedo es justo la muralla que tenes que atravesar para alcanzar la meta porque todo lo que hay del otro lado del miedo es lo que está bien... superar un miedo es sentir que el viento te pega en la cara, es estar en la cima de la montaña, es soñar con los ojos abiertos, es hacer volar tu imaginación mientras miras el mar, es sentir desde tu pecho hasta tu boca una sensación de felicidad y estallido que te cosquillea y se ve reflejado en tus ojos.
No le tengas miedo a la vida, la única manera de tocar el cielo con las manos es despojarse de los fantasmas interiores que te hablan despacito. Escucha la otra voz, esa que viene del lado izquierdo casi proponiéndote desafíos al borde de la cornisa.
Todo lo que haces de manera despelotada no tiene mas que un resultado despelotado.... así que ARRIESGÁ.

jueves, 2 de abril de 2020

Mujeres

¿Cuántas hay? millones.... la alta, la flaca, la gorda, la común, la ama de casa, la ridícula, la mambeada, la exitosa,  la que está toda operada, la puta, la virgen, la segunda, la de todos, la trabajadora, la multifacética, la que se depila, la que no, la casada, la prostituta,la luchadora, la madre perfecta, la que es hombre, la que banca la casa,  la creadora, la modelo, la arrepentida, la rara... y podría seguir. Es más, podría de decir que en un cuerpo pueden existir todas juntas.
Lo único importante es que cada una ame lo que es, y que sea apasionada, porque la pasión mueve y mueve de verdad.
Vamos a ganar cualquier lucha el día que dejemos de luchar contra  los fantasmas interiores, seamos la que queramos ser, la que pinte cuando pinta el sol, todos los días una distinta, o todos los días la misma. Seamos creadoras de nuestras propias historias y sobre todo protagonistas.

miércoles, 1 de abril de 2020

HUMANOS

No creo que el universo esté repartido en dos mitades exactamente dividiéndolo entre personas buenas y malas.  No creo que exista eso. El humano agarra las herramientas que adquirió y sale a la vida y ahí comienza a tropezar, equivocarse, pelear, sonreír, abrazar, amar, pifiar muchas  veces con estilo y otras feo feoooo.
 Nadie nace con la intención  de herir, de lastimar, de golpear. No se viene así de fábrica. Hay algo, y ese algo (que cada uno resolverá en el espacio que tenga que hacerlo) es lo que nos hace manejarnos del modo en que nos manejamos en este juego que dura para algunos muchos años y para otros no tantos.
Ojalá que esas personas que la pifian feo, muy feo... se encuentren con personas como las que me encuentro yo y de las que aprendo día a día. esas personas que te ayudan a ser mejor, a caer pero suave, a equivocarte pero no a juzgarte.
Existen humanos tan inmensos, tan sabios, tan inteligentes, esos que aman lo esencial de las personas, los que no se casan con lo superficial, los que se culturizan, los que perdonan, los que enseñan, los que pretenden dejar una huella en el otro... ¡ojo! una huella... NO UNA CICATRIZ.  Esos humanos que viven con la cabeza abierta en el momento justo y la boca cerrada cuando lo que puede decir no es agradable. Amo los humanos que me humanizan a mí.